La Legalidad esta en contra del voto del pueblo en Querétaro

El 23 de agosto de 2024 será una fecha que no olvidaré, porque los tribunales electorales y la legislatura de Querétaro demostraron que la legalidad está por encima de la voz del pueblo, cuando debería defender el voto.

A nivel nacional, los panistas argumentaban que el Congreso estaría sobre representado por MORENA y sus aliados PT-PVEM, y lucharon para que los votantes tuvieran más representantes del PAN en la Cámara, basándose en la cantidad de votos que obtuvieron. Sin entrar en tecnicismos, esa es básicamente la idea. Como ciudadano común, podría pensar lo mismo, sin embargo, la resolución les negó esta solicitud, ya que legalmente se establece que una coalición no es un partido, por lo tanto, no existe sobre representación de MORENA, aunque junto con sus aliados tengan una mayoría absoluta en el Congreso de la Unión.

Sin embargo, esta propuesta que parece muy ciudadana y cercana al pueblo se vuelve ridícula cuando en Querétaro el PAN ha tenido una mayoría absoluta en el Congreso durante tres años. A pesar de saber que esto sí era una sobre representación, no les importó, y aplicaron reemplacamiento, aumento de impuestos, deuda para el estado y, lo peor, modificaron la Ley Orgánica del Congreso para que, al ser los más votados, tuvieran la presidencia de la Junta Local de Coordinación Política en la siguiente Legislatura. Esta situación es inusual en cualquier país del mundo, donde la presidencia de una Cámara de Diputados siempre se otorga a la mayoría de diputados. Pero aquí el PAN aplicó para sí mismo lo que la legalidad no les concedió a nivel nacional. ¿Y por qué pudieron hacerlo aquí? Pues, debido a la sobre representación. Vaya ironía…

La misma legalidad en temas electorales también dejó fuera a dos diputados de la 4T que ya tenían su constancia de mayoría: Ulises de la Rosa por el PT y Erik Silva de MORENA. La razón fue la anulación de casillas, lo que modificó el resultado. En el caso específico de Erik Silva, los magistrados del tribunal anularon las casillas porque permitieron que tres o cuatro personas votaran en una casilla que no era la suya. Pero, por esta razón, se anularon cientos, y sumados con otras casillas, miles de votos. Desde este punto de vista, la legalidad electoral se convierte en enemiga de la votación, de la voluntad de un pueblo. Lo extraño y digno de reflexión es que estas maniobras legales terminan beneficiando en los tribunales locales al PAN, ya que los dos diputados que subirán en lugar de los impugnados serán del Partido Acción Nacional.

Otro caso que me llama la atención es el de Peña Miller, donde la votación fue muy cerrada y estuvo marcada por varias irregularidades. Lo más increíble, señalado por Iván Fabela, representante legal de MORENA ante el INE, es que en el conteo de la presidencia municipal de este municipio, se reportó en la hoja de incidentes que dos casillas habían sido quemadas, pero inexplicablemente, a la hora del conteo, se «regeneraron» como el Ave Fénix y se contaron sus votos, lo que dio la victoria a la candidata del PAN sobre Mauricio “El Centenario” del PT. Mauricio tuvo que contener a la gente para evitar una trifulca en el Palacio Municipal de Peña Miller, asegurando que la legalidad les daría la razón. Sin embargo, y pese a la impugnación que el Lic. Fabela presentó ante el TEEQ, le rechazaron la impugnación alegando que se entregó fuera de tiempo, aunque los videos de la entrega de la constancia de mayoría demuestran que se realizó en tiempo y forma.

El tema más impactante que debería llevar a la anulación de una elección es el caso de San Juan del Río. Además de estar impugnada la votación en este municipio por múltiples irregularidades en las casillas, incluyendo denuncias por violencia y quema de urnas, un video filtrado del consejo distrital de San Juan del Río muestra claramente cómo los paquetes electorales son abiertos y manipulados por trabajadores con gafetes del IEEQ. Esto debería ser motivo suficiente para solicitar la anulación de esa elección, la cual, hasta el momento, ha pasado por el tribunal, por la sala superior, y no se ha emitido sentencia alguna, dejando nuevamente a los procesos de legalidad electoral en entredicho y bajo fuertes críticas.

No quisiera verme tentado a señalar que los magistrados en Querétaro tienen una inclinación hacia el partido que gobierna actualmente, pero es llamativo que nunca apelan por la voluntad del pueblo, siempre anteponen la legalidad. En un ejercicio simple, me gustaría invitar a Enrique Sada Correa a que vaya a Santa Rosa Jáuregui, en el centro del distrito VII, a celebrar su triunfo, sin organizar un evento de acarreados, simplemente con los que estén ese día en la plaza, para ver si realmente goza del cariño popular. Esto lo digo en la zona más popular; me gustaría verlo en el Jofrito, Tierra Blanca o Palo Alto, para ver si lo reciben con gusto, si realmente fue apoyado por el pueblo, o si solo fue respaldado por la «Legalidad».